El engaño de la teoría evolutiva humana

El engaño de la teoría evolutiva humana

El darwinismo y la ingeniería social

Por: Andrés Felipe Pérez Velasco

Correo: andresfelipe3286@hotmail.com

Fecha de creación del texto: Julio 28 del 2019

Fecha de publicación en el blog: agosto 12 del 2019

La imagen del hombre en el modernismo a la luz de otra mirada filosófica y los aportes de los nuevos datos científicos.

El modernismo emergente después de la revolución francesa terminaría por impulsar un contexto epistémico instaurado en la razón antropológica, conformadora del homoeconómicus (la imagen del hombre), el sujeto como parte del proceso de producción económica, dejando en el pasado el viejo modelo económico feudal, tardíamente antropocéntrico, transmigrando hacia una lógica económica creada desde clase burguesa emergente, la cual terminaría por industrializar y funcionalizar la ciencia y la técnica. Dicho desarrollo modernista estaría acompañado por el anglicanismo, calvinismo y lutenarismo, la revolución industrial en sus dos etapas y el expansionismo colonial europea.

1. La tradición inglesa y la imagen de humanidad:

Por otro lado, fuera del paradigma instituido sobre el modernismo, y al interior de esta investigación, se propone el enfoque epistémico de los filósofos argentinos, profesores y autores Lucas Carena y Pablo J. Davoli, en la obra escrita por los dos autores se señala y trabaja dentro del modernismo la concepción de la tradición inglesa desde la psicología social psicológica del control democrático para la regulación del comportamiento, dentro de esta metafísica e imagen de  humanidad, los autores realizan un rastreo y reflexión filosófica e histórica para tratar de encontrar esa visión de humanidad instaurada desde el modernismo inglés para el control y represión de la población humana en todas las zonas geográficas de interés geopolítico para estas clases de poder dominantes.

Dentro de la propuesta de Carena y Davoli se expone y trabaja una concepción de humanidad creada por la élite hegemónica dentro del modernismo, esta concepción metafísica tendría sus orígenes en la obra de Thomas Hobbes con su obra El Leviatán (Hobbes, 1651). En la cual el autor construye toda una metafísica en la cual la libertad (libre albedrio) del ser humano y la sed de poder intrínseca en el individuo,  termina por generar en cada individuo una desconfianza y miedo natural por la otredad, por todo aquello que podría realizar en potencia cualquier individuo empleando dicha libertad y sed de poder, por lo anterior el sujeto termina por otorgar el poder al estado, el leviatán (Hobbes, 1651). Según ambos autores,  sería el economista, demógrafo y británico Thomas Robert Malthus quien basándose en el trabajo de Hobbes, iniciaría por darle a dicha concepción un enfoque auto-regulador, conformando en su “Ensayo sobre los principios de población” (1798) una tesis sistemática que terminaría por guiar el pensamiento ingles en los tiempos venideros (pos-modernismo), implantando una lógica maltusiana en la vida socio-cultural-económica, que posteriormente llegaría a explicar la evolución biológica, con la teoría evolutiva propuesta en primera instancia por Alfred Russell Wallace, y la obra “Del origen de las especies” de Charles Darwin del cual se hablará más adelante. Carena y Davoli prosiguen con la trayectoria de la epistemología (forma de crear, pensar y estudiar el conocimiento) de la tradición inglesa modernista, vinculando a Herbert Spencer el cual sería el primero en llevar la teoría evolutiva biológica al campo social, creando un darwinismo social, una ideología eugenésica social, por lo anterior Spencer estaría en contra de los estados de bienestar, los cuales promueven una idea humana de la sociedad, por el contrario Spencer apoyaría desde la élite dominante la idea de seguir con una estructura en la cual un grupo muy pequeño (1%) domina como raza apta y una inmensa mayoría es dominada como raza no apta.

Posteriormente sería Sir Francis Galton, quien basándose en las teorías de Darwin y el trabajo de Spencer, justificaría científicamente las diferencias entre las clases sociales, los sexos, donde la mujer sería vista como un ser inferior, y las diferencias inconciliables entre las razas, en las cuales se señalaba el carácter salvaje y animalesco las poblaciones autóctonas de los continentes: Indio, América, África y Asia, generando todo un contexto epistemológico que habilitaría la eugenesia para el diseño, construcción, control y represión de la sociedad.

2. El paradigma darwiniano, y los nuevos aportes desde la ciencia bioantropológica:

Según las últimas afirmaciones publicadas en la revista científica Science sobre la teoría evolutiva del ser humano, basadas en un descubrimiento científico, al parecer el Ardipithecus ramidus, más conocido actualmente como Ardi,  sería un millón de años anterior a Australopithecus afarensis, más conocido como Lucy, por lo anterior sería Ardi el ancestro en común más antiguo encontrado que compartiría el ser humano y el chimpancé (simio) (RTVE, 2009). En otras palabras, el ser humano y el chimpancé descienden (vienen) del mismo ancestro en común, el cual hasta la fecha sería Ardi (Ardipithecus ramidus) un primate primitivo, es decir, como se dice popularmente el ser humano evoluciono de lo que se entiende popularmente como un simio (primitivo ya extinto) y no del chimpancé (actual). Bajo la mirada de la actual teoría evolutiva del ser humano, Ardi como ancestro en común entre el humano y el chimpancé, sería parte del origen de varias ramas evolutivas: A) la primera sería la rama evolutiva de la cual evolucionaria el chimpancé actual, B) la segunda rama evolutiva sería el grupo parantrhopus, los cuales se extinguieron, su apariencia sería como popularmente se conoce como un humano con apariencia de simio, C) la tercera rama evolutiva sería el grupo australopithecus, también extintos, su apariencia sería como popularmente se conoce como un humano con apariencia de simio, y por último D) la rama evolutiva del grupo Homo, de la cual evolucionarían varias especies con apariencias similar al humano actual todas ellas ya extintas, de esta rama Homo también evolucionaría el ser humano actual (homo sapiens sapiens).

Comprendiendo lo anterior, el  bioantropólogo y español Maximo Sandín, doctor en ciencias biológicas y profesor de evolución humana de la universidad de Madrid, presenta un panorama académico muy contrario y diciente a la luz de su propia practica como docente. Sandín afirma en una entrevista, como es casi imposibles des-programar a los estudiantes una vez has cursado el 5 semestre en las universidades. Al interior de una entrevista Sandín expone como las obras de Charles Darwin: “El origen de las especies (1859)” y “El origen del hombre (1871)” manifiestan graves problemas en la observación y selección del grupo animal, siendo doméstico y no salvaje, provocando graves problemas en las posturas teóricas, y errores empíricos en la recolección de las muestras de las especies que recolecto en su viaje (Sandín, 2011). Sandín afirma que Darwin se basa en una obra temprana de Herbert Spencer para crear la teoría evolutiva, así mismo afirma que todos los errores mencionados anteriormente emergen en la capacidad de Darwin, pues aquel no era científico, era teólogo y naturalista aficionado, menciona también desde su vasta experiencia académica que otro de los aspectos que sigue reforzando la ideología del determinismo genético del darwinismo consiste en que la gran mayoría de los docentes universitarios no han leído las obras originales de Darwin. Según Sandín el determinismo genético del darwinismo es una ideología que se ha mantenido hasta la actualidad como un dogma para la mayoría de académicos y la masa poblacional. 

Al interior de una exposición en el segundo congreso de ciencia en España, Sandín afirma como su propio equipo ha realizado mediciones de tipo objetivas, con análisis multifactoriales con múltiples índices para la observación de algunas de las supuestas osamentas que conforman el árbol evolutivo del ser humano, en la investigación encontró que estas supuestas osamentas de los especímenes eran huesos de gorilas y chimpancés en distintos grados de maduración (jóvenes y maduros) donde algunos de estas osamentas estaban re-construidos (manipulados), con estos análisis multifactoriales con múltiples índices encontraron científicamente que las osamentas que se hicieron pasar como parte de la supuesta rama evolutiva humana eran huesos de chimpancés y gorilas (Sandín, 2018)

Máximo Sandín manifiesta que según las últimas investigaciones científicas, es completamente errónea y falsa las teoría de Darwin (evolución humana y de los animales), en la cual se explica que existen dentro de la misma especie miembros con genes más actos para sobrevivir y otros con genes menos actos, incluso dentro del misma grupo social animal (camada), Sandín afirma que según las últimas investigaciones científicas, se sabe que no existe la idea de gen, no hay un gen, lo que se ha llegado a descubrir es que lo que se comprendía como gen: “son una suma de secuencias que se agrupan en un momento concreto en función del ambiente concreto para responder a algo en concreto” (Sandín, 2011), y este no solo está compuesto por ADN, también está compuesto por ARN y proteínas, llegando a concebir el término [la información genética], como un resultado de la integración de elementos imprescindibles para la generación de la vida, incluyendo los virus y bacterias que están propagados en el medio ambiente. Así mismo es un error decir que el simio tiene un 99% de igualdad con el genoma humano, pues solo se mapeo el 1,5% del genoma, desechando lo que se entendía como genes basura que conforma el otro 98,5% del genoma, que según las últimas investigaciones científicas se sabe que son igual de importantes para el organismo, por lo anterior no existe el gen, no hay un gen del mal, o un gen egoísta, no hay genes actos y no actos. En otras palabras Sandín afirma: 1) la teoría de la evolución darwinista es falsa, la evolución si es que existe no es gradual, es por grandes saltos 2) la evolución de los organismos (si es que la hay), no es al azar, se puede estudiar científicamente, 3) no hay organismos actos y no actos, todos son actos si tiene un contexto ambiental adecuado, 4) la evolución (si la hay) no está en los genes, pues el medio ambiente tiene demasiada incidencia en los organismos, 5) se debe vivir con armonía en la naturaleza, la ciencia  ayuda a comprenderla, y no es para manipular la naturaleza pues es muy peligroso, y 6) Sandín afirma que no existe una certeza del origen de la vida y del hombre, tampoco tiene una teoría consistente de lo anterior, actualmente se habla que se podría pensar la vida como algo inherente al universo.

Si se comprende lo anterior, cabría preguntarse ¿por qué se instauro el enfoque epistémico de la ideología del determinismo genético del darwinismo desde el pensamiento inglés modernista?

Al igual que Carena y Davoli. Sandín señala que al poco tiempo de la publicación de la obra de Darwin, el eminente miembro de la alta sociedad inglesa Thomas Henry Huxley, presidente de múltiples sociedades científicas de la época, optaría por reclutar a Darwin dado la naturaleza eugenésica de su teoría evolutiva, y crearía el X Gropu (X Club) con miembros como Herbert Spencer, entre otros científicos de renombre del momento, dentro del grupo se buscaba la validación y la propaganda de la nueva teoría evolutiva de Darwin, como el nuevo dogma, la única verdad, siendo la ciencia la fe verdadera, la ciencia como fe, convirtiendo el darwinismo en el sustituto de la religión, según afirma Sandín el X Club es desconocido por casi todos los biólogos y la sociedad en general (Sandín, 2011). Por lo anterior, y rescatando lo declarado por el mismo Darwin en su propia autobiografía, Carena, Davoli y Sandín afirman que la teoría de la evolución fue adoptada fervientemente por la alta sociedad inglesa para crear e implantar una nueva metafísica de la imagen del ser humano, orientada por el grupo de poder dominante con el fin de concebir una paradigma de orden eugenésico, en el cual se teoriza una sociedad donde los grupos dominantes, como el grupo más acto para la supervivencia, podrán gobernar, controlar y regular el comportamiento de los grupos de población menos actos, comprendiendo desde esta concepción a la gran masa poblacional como: inferior, defectuosa, ignorante, viciosa y decadente. Todo lo anterior, terminaría por crear un pensamiento maltusiano según Carena, Davoli y Sandín, el cual se propagaría desde los grupos de poder en toda la historia occidental, como el nuevo paradigma humano, la ANIMALIZACIÓN darwiniana de la imagen del hombre, paradigma el cual se seguiría instaurando y promoviendo por medio de la academia (escuelas, institutos y universidades) a través de la acción invisible de ingeniería social (enlace a texto).

Referencias:

Hobbes. T, (1651) El Leviatán. Recuperado de: https://freeditorial.com/es/books/leviatan

(RTVE, 2009). Antes de ‘Lucy´fue Árdi´, el ancestro común del hombre y el chimpancé. Recuperado de http://www.rtve.es/noticias/20091001/antes-lucy-fue-ardi-ancestro-comun-del-hombre-chimpance/294671.shtml

Carena. L., y Davoli. P. (2016). la guerra invisible, acción psicológica y revolución cultural. Doi: ISBN 978-987-42-0829-3.

Sadín. M, (2011). Entrevista completa a Máximo Sandín. Recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=UtN4xZRMZHg

Sadín. M, (2018). “Sobre hombres y simios”. Maximo Sandín. II Congreso de Ciencia. Recuperado de: https://www.youtube.com/watch?v=TApqqOpjyg4